Organoides y cultivos celulares en 3D
Uno de los avances recientes más interesantes en la investigación de las ciencias biológicas es el desarrollo de sistemas de cultivo celular en 3D, como organoides, esferoides y modelos de organ-on-a-chip. Un cultivo celular en 3D es un ambiente artificial en el cual las células pueden crecer e interactuar con su entorno en las tres dimensiones. Estas condiciones son similares a un estado in vivo.
Los organoides son un tipo de cultivo celular en 3D que contiene tipos celulares específicos de un órgano que pueden mostrar la organización espacial y replicar algunas de las funciones del órgano en cuestión. Recrean un sistema muy relevante fisiológicamente que permite a los investigadores analizar cuestiones complejas y multidimensionales, como el comienzo de una enfermedad, la regeneración de tejidos y la interacción entre órganos. La microscopía óptica es un enfoque esencial para estudiar las complejas interacciones y relaciones en los organoides.
Las soluciones de imagen Leica apoyan el estudio de estas muestras multifuncionales con sistemas que permiten obtener imágenes profundas y en alta velocidad tanto para mediciones de punto final como para el estudio de dinámicas con imagen de célula viva.
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Eficiencia optimizada para obtener imágenes de modelos 3D
Leica Microsystems ha desarrollado diversas posibilidades que ofrecen un mayor rendimiento en las imágenes de organoides y otros modelos de cultivos celulares 3D.
Desde métodos tradicionales, como la microscopía de campo ancho o confocal, hasta otros más avanzados, como las imágenes multifotónicas o la lámina de luz, Leica Microsystems hace posible visualizar los detalles celulares más ínfimos, así como la arquitectura general del tejido en los cultivos celulares 3D.
Leica Microsystems ofrece diversas soluciones para obtener imágenes de los cultivos celulares en 3D de forma más sencilla y rápida.
Superar desafíos en la obtención de imágenes de organoides
La obtención de imágenes es esencial para estudiar los cultivos celulares en 3D, como organoides y esferoides.
Conseguir imágenes de organoides de forma eficiente plantea una serie de desafíos nuevos porque implican grandes volúmenes. Con las técnicas de aclaramiento se pueden fijar, inmunomarcar y estudiar los organoides para visualizar su estructura 3D. Por lo general, estos estudios se realizan con microscopios confocales porque obtener imágenes de cultivos con más de 2-3 capas de células puede resultar complicado para los sistemas de campo ancho, que tienen una borrosidad inherente que enmascara la señal de interés.
Los organoides también se pueden usar para estudiar procesos dinámicos. El estudio de organoides vivos se enfrenta a los problemas típicos de la obtención de imágenes, como la fototoxicidad y la baja relación señal-ruido, en particular cuando las imágenes son profundas. En los últimos tiempos se vienen prefiriendo los métodos de microscopía de rápida adquisición, como FLIM o la lámina de luz, para estudiar organoides vivos porque no alteran la fisiología de los especímenes.
